The Big Van Theory, el grupo de monologuistas científicos fundado por Eduardo Sáenz de Cabezón -profesor de la Universidad de La Rioja y ganador del I Certamen Famelab- inauguró el lunes 29 de junio, el programa oficial de Cursos de Verano UR 2015.
En el espectáculo ‘Ciencia para difractarse de la risa’ participaron el nanobiotecnólogo Albert Vivó; el biólogo marino Juan Junoy; el físico Javier Santaolalla; y el informático Eduardo Sáenz de Cabezón.
Los Cursos de Verano UR 2015 están gestionados por la Fundación UR y cuentan con el patrocinio de Banco Santander a través de Santander Universidades, y la colaboración de medio centenar de empresas y entidades de la región y de fuera de ella.
La Universidad de La Rioja quiere así aproximarse a la sociedad y a distintos puntos de La Rioja el Campus de las Ideas, la Ciencia y la Cultura a través de un conjunto de actividades (cine, conferencias, campos de trabajo, idiomas, cursos) que se desarrollarán desde el 22 de junio al 21 de noviembre, aunque concentradas fundamentalmente en julio y septiembre.
THE BIG VAN THEORY.- Eduardo Sáenz de Cabezón, profesor de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad de La Rioja, ganó en 2013 el I Concurso Famelab de monólogos científicos y, junto con los finalistas del certamen, fundó el grupo The Big Van Theory que ha recorrido España entera y medio mundo con su propuesta de Ciencia y humor.
The Big Van Theory (La Teoría del Furgonetón) es un grupo de científicos de todos los campos del conocimiento que explican la Ciencia que ellos mismos realizan de un modo muy peculiar: con humor.
Dieciséis científicos investigadores de diferentes áreas del conocimiento (Biología, Química, Matemáticas y Física) buscan, a través de nuevos mecanismos de comunicación, acercar la ciencia al público general.
Los monólogos científicos de The Big Van Theory comienzan con una introducción cómica sobre los científicos y el frikismo, siguen con una serie de monólogos sobre temas o fenómenos de ciencia particulares propios de la formación de su intérprete, y terminan con un turno de preguntas donde el público plantea dudas sobre los temas expuestos o sobre cualquier otro tema de ciencia, y los científicos responden interactuando con él e improvisando.
El carácter multidisciplinar, junto con la formación adicional de cada uno de los miembros -especialmente en artes escénicas como danza, teatro, monólogo, cuentacuentos, clown…-, dotan al grupo de gran fuerza creativa. A través del género teatral del monólogo, estos científicos suben al escenario al más puro estilo del Club de la Comedia, haciendo un espectáculo para todos los públicos en el que se aprende ciencia al mismo tiempo que uno se difracta de risa.