En declaraciones a la Agencia EFE dijo que detrás de cada político hay diversos pensadores o «maquiavelos» que sostienen una larga tradición de «justificación de la mentira». «Cuando un político se instala en el poder, lo que quiere es mantenerlo, considera que cualquier medio es bueno y recurre a la ética de la responsabilidad» para justificarlo.
En su opinión, habría que exigir a los políticos que fueran «más transparentes», para constituirse en los «verdaderos representantes» de los ciudadanos. En ocasiones, los políticos mienten «descaradamente», como cuando dicen que no se ha pagado un rescate y sí se ha pagado, o sobre asuntos que afectan a la vida de muchas personas. «Sin ir más lejos», ha destacado, «mienten en los programas electorales, que luego no cumplen».
Sábada ha agregado que «los partidos políticos se están convirtiendo en pequeñas empresas que encima funcionan mal». Para este filósofo, «los seres humanos tendemos a la mentira, somos vulnerables y frágiles, pero tenemos la necesidad de disimular e intentar parecer mejor de lo que somos».
Este comportamiento es «relativamente normal», pero hay momentos en los que la ética debe enfrentarse a la mentira si ésta es inmoral, «cuando uno miente e instrumentaliza al otro para aprovecharse y hacer mal». Aunque haya mentiras blandas o blancas, las personas deben decir la verdad, ha dicho.
Javier Sádaba Garay (Portugalete, Vizcaya-1940) es catedrático de Filosofía Moral de la Universidad Autónoma de Madrid. Es licenciado en Filosofía y Teología y se doctoró con una tesis sobre El concepto de filosofía en Ludwig Wittgenstein y su aplicación al lenguaje religioso.
Ha sido profesor en diferentes universidades del mundo como Tübingen (Alemania), Columbia (Nueva York, EE UU), Oxford y Cambridge (Reino Unido). Es miembro del Observatorio de Bioética y Derecho de la Universidad de Barcelona y es autor de obras como Saber vivir, Saber morir, Las causas perdidas, El amor contra la moral, Lecciones de filosofía de la religión, Dios y sus máscaras, Diccionario de ética, Amor diario o Principios de bioética laica.