Los aspectos más críticos, en términos de impacto ambiental en el ámbito hospitalario, son el transporte de pacientes, personal y suministros, así como el consumo intensivo de materiales y la consecuente generación de residuos.
Por otro lado, la ubicación de los hospitales, así como la adquisición sostenible de material y la implementación de sistemas eficientes de gestión de residuos son determinantes para mejorar el desempeño ambiental del sector.
Estas son algunas de las conclusiones de la tesis ‘Índices de eficiencia ambiental en el sector público hospitalario’ de Vanesa Jiménez Lacarra, subdirectora de Infraestructuras y Servicios Técnicos del Servicio Riojano de Salud, que ha obtenido el grado de doctora por la Universidad de La Rioja.
Desarrollada en el Departamento de Ingeniería Mecánica –en el marco del programa 881D Doctorado en Innovación en Ingeniería de Producto y Procesos Industriales (Real Decreto 99/2011)– la tesis ha sido dirigida por Julio Blanco y Eduardo Martínez Cámara, y ha logrado la calificación de sobresaliente ‘cum laude’.
En su tesis doctoral aborda la creciente importancia de la sostenibilidad en el sector hospitalario mediante la propuesta y aplicación de índices de eficiencia ambiental como el Análisis de Ciclo de Vida (ACV), así como el impacto disruptivo que tuvo la pandemia de la COVID–19 sobre los índices de eficiencia ambiental; y explora las ventajas ambientales de descentralizar la atención médica
En primer lugar, con el ACV Vanesa Jiménez ha evaluado los impactos ambientales asociados a las diversas actividades que componen el funcionamiento de un hospital, desde el suministro de materiales hasta la gestión de residuos y el transporte.
Así, identifica el transporte de pacientes, personal y suministros, así como el consumo intensivo de materiales y la consecuente generación de residuos como los aspectos más críticos en términos de impacto ambiental.
La contribución del transporte a los índices globales calculados es la más significativa debido a la gran intensidad de viajes que ocurren en un hospital en un día normal
Mientras que factores como la ubicación estratégica de los hospitales, las políticas de adquisición sostenible (priorizando materiales con menor huella ambiental) y la implementación de sistemas eficientes de gestión de residuos son determinantes para mejorar el desempeño ambiental del sector.
Con su investigación, la doctora Vanesa Jiménez ha obtenido tanto un índice de eficiencia ambiental global como índices de eficiencia ambiental clasificados en 11 categorías de impacto ambientales.
En algunos casos, como en el índice de agotamiento abiótico la suma del transporte de empleados y pacientes es responsable de más del 90% de este índice ambiental.
La contribución del transporte a los índices globales calculados es la más significativa debido a la gran intensidad de viajes que ocurren en un hospital en un día normal.
Por otro lado, el consumo de materiales hace una contribución a todos los índices obtenidos y contribuye con entre el 15–25% del impacto total, siendo los más significativos en los índices relacionados con el agotamiento de recursos fósiles, el potencial de toxicidad humana, la ecotoxicidad terrestre y el potencial de creación de oxidantes fotoquímicos.
A su vez, la producción de residuos ocupa un lugar destacado en los índices de ecotoxicidad del agua dulce y marina aportando al índice un 10,8% y 7,5 % respectivamente.
IMPACTO DE LA COVID–19
En su tesis, la doctora Jiménez Lacarra también analiza el impacto disruptivo de la pandemia COVID-19 sobre los índices de eficiencia ambiental previamente establecidos, mostrando un incremento del impacto ambiental, ya que todos los índices aumentaron en el año 2020 respecto al año 2019 en un promedio de 9,42%. El índice asociado al potencial de calentamiento global en 2020 se incrementó en un 9,25 % respecto al año 2019.
En todos los índices, la producción de residuos hospitalarios durante la pandemia representa el mayor incremento de impacto, seguido del consumo de gases medicinales. Los datos obtenidos muestran un aumento en la producción de residuos sanitarios peligrosos, siendo el 92 % de los residuos generados en el hospital objeto del estudio en 2020 procedentes de materiales en contacto o posible contacto con el COVID-19.
Sin embargo, durante 2020 el número total de viajes de pacientes al hospital disminuyó en comparación con el año anterior. En los casos no afectados por COVID-19, se implementaron medidas de telemedicina para diagnosticar y brindar atención a los pacientes con el fin de evitar desplazamientos y posibles contactos.
A través del estudio comparativo de un hospital comarcal antes y durante la pandemia (2019-2020), se evidencia que, si bien la crisis sanitaria impulsó la adopción de soluciones innovadoras como la telemedicina, también generó un aumento sin precedentes en la producción de residuos y un incremento sobre el consumo materiales, principalmente por los Equipos de Protección Individual (EPIs) y, además, alteró significativamente los patrones de transporte.
Esto refuerza la necesidad de una transición hacia un modelo sanitario centrado en el valor, que priorice la eficiencia, la prevención y la reducción de visitas presenciales mediante el aprovechamiento de tecnologías digitales.
DESCENTRALIZACIÓN DE LA ATENCIÓN
Finalmente, la tesis explora las ventajas ambientales de descentralizar la atención médica, comparando tres escenarios: la atención hospitalaria convencional (1), la atención domiciliaria (2) o en centros de salud locales (3); demostrándose que estas dos últimas opciones pueden reducir significativamente el impacto ambiental asociado al transporte sanitario.
En el escenario 1, los pacientes se desplazan desde su lugar de residencia hasta el hospital de referencia para ser hospitalizado o atendido en consulta.
En el escenario 2 son los profesionales sanitarios, a través de las unidades de Hospitalización a domicilio o especialistas desplazados a centros de salud, los que se desplazan con vehículos híbridos de gasolina.
En el escenario 3, se analiza el impacto del desplazamiento de los profesionales en vehículo eléctrico.
En los tres casos, la contribución del transporte tiene un impacto significativo en todas las categorías estudiadas, siendo la ecotoxicidad del agua marina y el agotamiento abiótico las categorías de mayor impacto.
Comparando los resultados del escenario 2 respecto al 1, se observa una reducción del impacto ambiental en todas las categorías. En este caso, el resultado asociado al potencial de calentamiento global se reduce aproximadamente en un 22% para los años 2021,2022 y 2023.
Estos resultados indican que los profesionales sanitarios que se desplazan al domicilio del paciente o al centro de salud cercano, reducen el impacto ambiental en todas las categorías de impacto analizadas.
El uso de vehículos eléctricos por los profesionales para prestar la atención a domicilio ofrece beneficios adicionales en términos de reducción de emisiones y agotamiento del ozono, pero también plantea desafíos relacionados con la producción y reciclaje de baterías, que aumentan la toxicidad humana y ecotoxicidad acuática.
Esto subraya la importancia de realizar una evaluación completa del ciclo de vida al considerar soluciones aparentemente "verdes".
En conclusión, esta investigación proporciona herramientas valiosas para la toma de decisiones en el ámbito sanitario, promoviendo un enfoque más sostenible y eficiente que considere tanto los aspectos ambientales como económicos y sociales, sin comprometer la calidad asistencial.
La tesis también identifica áreas clave para futuras investigaciones, incluyendo el análisis del impacto de las variantes de COVID-19 y la exploración de estrategias para una gestión integral y sostenible a largo plazo.
Etiquetas
- Eduardo Martínez Cámara, Julio Blanco Fernández, ODS 11: Lograr que las ciudades sean más inclusivas seguras resilientes y sostenibles, ODS 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos, ODS 14: Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, ODS 15: Gestionar sosteniblemente los bosques luchar contra la desertificación detener e invertir la degradación de las tierras detener la pérdida de biodiversidad, ODS 3: Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades, Vanesa Jiménez Lacarra
Categorías
Noticias relacionadas
«Es un orgullo que todos hayáis elegido la Universidad de La Rioja para estudiar»
La novela prospectiva juvenil española es un género representativo de la crisis posmoderna
Actividades relacionadas