Cómo mezclar elementos de lo noticioso con la divulgación
Reportaje publicado en Tercer Milenio, suplemento de Heraldo de Aragón, el 27 de junio de 2006.
“En ocasiones, la audacia de atreverse de frente con un tema matemático, ligado además a un avance puntero y, para colmo, teórico, tiene premio. Así, un reportaje publicado en las páginas de Tercer Milenio en junio de 2006 mereció una mención de honor en la XX edición de los Prismas Casa de las Ciencias a la Divulgación, entregados en noviembre de 2007.
Se titulaba “Topología. ¿Descubierta la vacuna contra la poincaritis?” y contenía elementos tan variados y de combinación tan atractiva como la conexión con la Historia de la Ciencia a través de un problema históricamente irresoluble: la demostración de la conjetura de Poincaré, la polémica entre Perelman y los matemáticos chinos y japoneses, la aproximación al campo de la Topología y sus aplicaciones más cotidianas, la referencia al entonces próximo Congreso Matemático Internacional celebrado en Madrid…, todo ello junto a dosis de humor (presente ya en el mismo título) y propuestas lúdicas en forma de pasatiempos topológicos.
El autor de la audacia es Miguel Barral, químico y excelente divulgador de cualquier campo de la Ciencia. Su forma de enfocar esta tarea brilla por su sencillez: “No considero que las Matemáticas sean ni más inaccesibles ni más complicadas de entender ni de explicar. Si acaso más abstractas, por lo que procuro buscar analogías en el mundo cotidiano, aunque eso es lo que intento sea cual sea la disciplina a divulgar”.
En su opinión, lo mismo pasa con la forma de utilizar el lenguaje, “la clave está en quedarse con la idea, prescindir de la jerigonza científica y contarlo de la forma más sencilla posible y, a poder ser, desde un arranque original, que ejerza de cebo o atractivo punto de enganche”. En el caso concreto de la “poincaritis”, “el tema es sumamente interesante –señala-, porque cualquier cuestión que haya desafiado a los científicos, sean del campo que sean, durante años lo es.
El mejor ejemplo de empleo de una analogía es explicar que todos aplicamos la Topología a diario, cuando planificamos mentalmente cómo ir a un sitio o manejamos el plano del metro. El arranque original es el plantearlo como el descubrimiento de la vacuna de una extraña enfermedad de un nombre tan llamativo como ‘poincaritis”.
‘Periodistas en el país de las matemáticas’, por Pilar Perla. Revista ‘Uno’. Pág. 35-37 nº 48. |
